PARIS / FRANCFORT (Reuters) - Alarmados por la amenaza planteada por las empresas de Silicon Valley a sus negocios en el desarrollo de sistemas de conducción autónoma, era evidente en el Salón de París esta semana que los fabricantes de automóviles están tratando de defenderse mediante la cooperación en las áreas de desarrollo de la tecnología, donde previamente que podrían haber tratado de competir.